Desgraciadamente, los ciberataques a empresas son una realidad cotidiana en todo el mundo; por eso, conviene conocer las posibles amenazas a las que nos podemos enfrentar, así como sus efectos, para estar preparados.
Y es que el problema de la ciberseguridad no sólo es importante sino también creciente, como así demuestran los muchos estudios que se realizan sobre el tema.
Por ejemplo, el último informe “Threat Landscape 2023” elaborado por ENISA (la Agencia para la Ciberseguridad de la Unión Europea) que destaca como durante la última parte de 2022 y la primera mitad de 2023 se produjo una notable escalada de ciberataques, estableciéndose un récord tanto en cuanto al número de incidentes como a su variedad.
La causa principal fue la invasión de Ucrania, un conflicto bélico que no solo se lucha sobre el terreno sino también en Internet. De hecho, en el periodo citado se habrían producido la aparición de numerosos grupos nuevos dedicados al hacktivismo.
Por otro lado, entre los distintos tipos de ciberataques, el ransomware figura en lo más alto, con un porcentaje de más del 30% (y un crecimiento constante que sigue al alza), seguido por los Ataques de Denegación de Servicio (DoS) con un porcentaje de más del 20%.
Estos serían, por tanto, los ataques más recurrentes que puede sufrir nuestra empresa, pero no los únicos como explicamos más adelante. En cualquier caso, queda clara la importancia de la ciberseguridad en las organizaciones de hoy día, ya sean grandes empresas o pymes.
Algo que incluso puede convertirse en un diferenciador clave para obtener mejores resultados de negocio. Así lo dice el informe “El estado de resiliencia en ciberseguridad 2023” de Accenture, que opina que “alinear la ciberseguridad con los objetivos de negocio aumenta la capacidad de impulsar el crecimiento, la participación de mercado, la satisfacción y confianza del cliente, y la productividad de los empleados”.
Por todo ello, a continuación vamos a ver los distintos tipos de ataques que podemos sufrir, las consecuencias que pueden suponer y qué medidas podemos tomar para prevenirlos y/o afrontar un ciberataque.
¿Qué es un ataque cibernético en una empresa?
Un ciberataque de carácter empresarial no es otra cosa que una acción deliberada y maliciosa que busca comprometer los sistemas informáticos, las redes o los dispositivos de una organización con el objetivo de obtener acceso no autorizado, sustraer información sensible o causar daños de algún tipo a la organización.
En el primero de los casos, el objetivo principal del ataque podría ser acceder de forma no autorizada para intentar hacerse con información confidencial. Esta podría ser datos financieros, elementos relativos a la propiedad intelectual de la empresa o información personal de nuestros clientes y/o empleados.
Por tanto, si logran acceder los atacantes podrían robar información sensible con fines lucrativos, para obtener una ventaja competitiva o con el objetivo de causar daños a la empresa.
Uno de estos posibles daños es dañar o inutilizar los sistemas informáticos de la organización, lo que puede provocar interrupciones en el servicio, pérdida de productividad y, a la postre, daños económicos.
Finalmente, la finalidad del ciberataque puede ser comprometer la funcionalidad de la infraestructura informática de la empresa, afectando a nuestra capacidad para operar sistemas y aplicaciones, lo que sin duda puede tener un impacto significativo.
¿Qué tipo de ciberataque es el más peligroso para las empresas?
Sin duda, conocer los distintos tipos de ciberataques es primordial para saber cómo actuar y cómo afrontarlos en caso de que nos veamos obligados a ello. Por ello, vamos a repasar a continuación los más habituales haciendo hincapié en su peligrosidad:
Phishing
Se trata de un intento de engaño a través de correos electrónicos o mensajes falsos cuya finalidad es obtener información confidencial o instalar malware en los equipos de la empresa. Un ejemplo recurrente de phishing podría ser ese correo electrónico que simula ser de nuestro banco y nos solicita actualizar nuestros datos personales.
Está considerado como una amenaza con una peligrosidad alta, ya que puede comprometer información sensible y porque se aprovecha del “lado humano”; esto es de la ingenuidad y el descuido de los empleados.
Existe una modalidad llamada spear phishing que es aún más peligrosa (ya que consiste en un ataque más personalizado) y también otra denominada vishing, que básicamente es como el phishing con la salvedad de que se utiliza para ello el teléfono en vez del correo electrónico.
Malware
Se trata de un software malicioso que busca infectar dispositivos para poder robar información, dañar sistemas o, incluso, tomar el control de los dispositivos informáticos de la empresa. Un ejemplo claro podría ser un troyano bancario que, una vez instalado en el sistema, robe las claves de acceso a nuestra cuenta bancaria para vaciarla.
Pero lo cierto es que hay muchos tipos de malware, entre otros los virus, gusanos, troyanos, spyware… Toda una pléyade de amenazas cuya peligrosidad es alta ya que pueden causar daños graves a los sistemas informáticos e incluso la pérdida de datos.
Ransomware
Se trata de un tipo específico de especial peligrosidad ya que bloquea el acceso a los datos de una empresa y exige un rescate para poder desbloquearlos. De hecho, como mencionábamos antes, el ransomware continúa siendo la principal amenaza en todo el mundo y se espera que este cibercrimen siga aumentando.
Si lo sufrimos podemos vernos abocados a interrumpir nuestro negocio y, en el peor de los casos, a la pérdida de datos irrecuperables. Un ejemplo de ransomware sería los casos que hemos visto de empresas que fueron atacadas (como el Hospital Clínic de Barcelona y el Ayuntamiento de Sevilla en 2023) y vieron como los hackers encriptaban sus archivos y exigían un pago en Bitcoin para liberarlos.
Ataque de Denegación de Servicio (DoS)
Se trata de un intento malicioso que consiste en inundar los servidores de una empresa con tráfico falso para sobrecargarlos y hacerlos inaccesibles a los usuarios. Es decir, algo así como bloquear la entrada a una tienda llenándola con una multitud de clientes que no son tales impidiendo que los clientes reales puedan entrar.
Ejemplos de ataques de denegación de servicios hemos visto muchos, pero por ejemplo el pasado verano se produjeron varios a periódicos españoles por parte de hackers prorrusos que colapsaron sus webs.
La peligrosidad es alta ya que, al afectar a la disponibilidad de los servicios online de una empresa, puede ser la causa de importantes pérdidas económicas y también de una caída de su reputación.
Inyección de Código SQL
Es un tipo de ataque cibernético que explota vulnerabilidades en aplicaciones web que utilizan bases de datos SQL. Consiste en que se inyecta un código malicioso en la entrada de datos de la aplicación, con el objetivo de manipular la consulta SQL que se envía a la base de datos.
Para entenderlo, podemos imaginar que un hacker es capaz de introducir una orden falsa en un formulario web y engañar a la aplicación para que revele información confidencial de la base de datos. Por tanto, la inyección de código SQL tiene como principal objetivo acceder a esa información confidencial o bien modificar parámetros de la base de datos.
Un ejemplo sería el ciberataque que sufrió la aerolínea Air Europa en 2023 y que supuso que quedaran al descubierto datos de tarjetas de la compañía como el número, fecha de caducidad y código CVV.
Así, como se puede entender fácilmente, este tipo de ataque tiene también una peligrosidad elevada ya que puede comprometer la integridad y confidencialidad de información importante almacenada en las bases de datos de las empresas.
@ronald.sanz Respuesta a @🤍💫Chili💫🤍 #alerta #ciber #ataque #compañia #aerea #española #air #europa #vuelo #avion #estafa #viaje #tarjeta #credit #banco #cuenta #omg #españa #lentejas #fyp #holiday #noticias #teamleones🦁 #ronaldsanz ♬ sonido original – Ronald Sanz
Otros tipos de ataques
Además de los anteriores, existen otros tipos de ataques cibernéticos que también nos deberían sonar:
- Ingeniería social: Manipulación de personas para obtener información confidencial o realizar acciones no deseadas.
- Ataques a la cadena de suministro: Explotación de vulnerabilidades en proveedores para acceder a los sistemas de una empresa.
- Ataques de día cero: Ataques que explotan vulnerabilidades desconocidas para las que no existe parche de seguridad.
¿Cómo afectan los ciberataques a las empresas?
Las consecuencias de los ciberataques a empresas puede ser numerosas y de distinta gravedad y tener un impacto significativo en las operaciones, la reputación y la rentabilidad de una empresa:
Impacto financiero
- Pérdidas directas: Desde robo de dinero hasta daños a los sistemas informáticos, pasando por posibles costes de recuperación y/o pago de rescates en el caso del ransomware.
- Pérdidas indirectas: Interrupción del negocio, pérdida de productividad, pérdida de clientes y daño a la reputación. Adicionalmente, puede haber costes financieros asociados con la recuperación y reparación de los sistemas afectados.
- Costes legales: Posibles sanciones por incumplimiento de las normas de protección de datos.
Impacto en las operaciones
- Interrupción del servicio: Nuestros sistemas informáticos pueden quedar inoperativos afectando a la producción, las ventas, la atención al cliente y otras funciones críticas.
- Pérdida de datos: Si nos roban (o se pierden) datos confidenciales esto sin duda puede afectar a la competitividad de nuestra empresa.
Impacto en la reputación
- Pérdida de confianza: Nuestros clientes, socios y/o inversores pueden perder la confianza en la capacidad de nuestra empresa para proteger sus datos.
- Daño a la marca: La imagen pública de nuestra empresa puede verse afectada negativamente.
- Dificultad para atraer y retener talento: Los profesionales pueden ser reacios a trabajar para una empresa que ha sido víctima de un ciberataque.
Impacto legal
- Sanciones: Nuestra empresa puede ser sancionada por no cumplir con las normas de protección de datos, haciendo que tengamos que hacer frente a multas y/o sanciones.
- Litigios: Las empresas puede ser demandadas por clientes o empleados que hayan sido afectados por un ciberataque.
Por tanto, los ciberataques pueden tener un impacto significativo en las operaciones, la reputación y la rentabilidad de una empresa.
¿Cómo podemos prevenir un ciberataque a nuestra empresa?
Leyendo lo anterior, queda clara la importancia de la prevención y la preparación ante las posibles amenazas, especialmente en el caso de las pymes y los autónomos cuya infraestructura suele ser más débil.
Así, para estar prevenidos ante los ciberataques es crucial implementar distintas medidas para proteger nuestra empresa:
Medidas de seguridad informática
- Firewalls: Bloquean el acceso no autorizado a la red de la empresa.
- Antivirus: Detectan y eliminan software malicioso.
- Software de detección de intrusiones (IDS): Monitoriza la red en busca de actividades sospechosas.
- Sistemas de prevención de intrusiones (IPS): Bloquean automáticamente el tráfico malicioso.
- Control de acceso a la red: Restringen el acceso a los recursos de la red en función del rol de cada usuario.
- Cifrado de datos: Protege la información confidencial en caso de robo o pérdida de dispositivos.
- Actualizaciones de software: Instala las últimas actualizaciones de seguridad para corregir vulnerabilidades conocidas.
Capacitación de los trabajadores sobre seguridad cibernética
- Es fundamental concienciar a los empleados sobre los riesgos de los ciberataques (phishing, malware, ingeniería social, etc.).
- Debemos enseñarles a identificar y evitar correos electrónicos y sitios web sospechosos.
- Capacitarlos en el uso seguro de contraseñas y en la protección de la información confidencial.
- Fomentar una cultura de seguridad en la empresa.
Plan de respuesta a incidentes
- Es importante definir un plan de acción para responder a un ciberataque de manera rápida y eficaz.
- Debemos identificar los roles y responsabilidades de cada miembro del equipo en caso de ataque cibernético.
- Hay que establecer procedimientos para contener el daño, identificar la causa del ataque y restaurar los sistemas afectados.
- Por último, es muy recomendable realizar simulacros de ataques para probar la eficacia del plan de respuesta.
Contratar un proveedor de seguridad informática
- Fundamental buscar la ayuda de un experto informático para mejorar la seguridad de nuestra empresa.
- Un proveedor de seguridad puede realizar evaluaciones de riesgos, implementar medidas de seguridad y brindarnos soporte técnico.
Mantenernos actualizados sobre las últimas amenazas
- Recomendable suscribirse a boletines de seguridad y blogs especializados en ciberseguridad.
- También asistir a conferencias y eventos sobre seguridad informática.
- Y, por supuesto, seguir las recomendaciones de las autoridades en materia de seguridad cibernética.
En cualquier caso, debemos recordar que la prevención de ciberataques es un proceso continuo que requiere un enfoque proactivo y una inversión constante en seguridad. Y por supuesto, en caso de sufrir un ataque cibernético, es importante comunicarlo a las autoridades lo antes posible.
¿Qué importancia tiene la ciberseguridad en el mundo digital actual?
Por todo ello, no es difícil entender la importancia de la ciberseguridad, tanto a nivel personal como, sobre todo, empresarial, para evitar las graves consecuencias que puede suponer un ataque de estas características.
Los ciberataques a empresas son una amenaza real y para evitarlos puedes recurrir a las soluciones de ciberseguridad que ofrece Orange, que te permitirán tener tu empresa protegida, estes donde estés.
Imágenes | Foto de portada de videoflow. Resto de Freepik