El Club de Excelencia en Sostenibilidad ha hecho públicos los resultados de su informe Spain 20.20, elaborado en colaboración con empresas como Orange, que revela el alto potencial de las TIC como generadoras de crecimiento en nuestro país.
Dicho análisis estudia los beneficios derivados de la aplicación de las TIC en la economía, tomando como base las distintas iniciativas emprendidas en este sentido por las empresas asociadas, y elabora una estrategia para el desarrollo de una agenda de transformación española, sustentada en la implantación de las nuevas tecnologías y la sostenibilidad.
Y es que en un contexto donde la investigación y los nuevos modelos de crecimiento son claves para el éxito económico, las nuevas tecnologías se destacan como elemento propulsor de este nuevo ecosistema, ya que ayudan a empresas y organizaciones a conseguir una mayor competitividad y eficiencia. Esto se traduce al mismo tiempo en generación de riqueza y empleo, lo que hace de ellas un factor clave para que España pueda alcanzar apuntarse a la carrera del desarrollo sostenible, en triple vertiente: económica, social y medioambiental.
En lo que al aspecto económico se refiere, el informe Spain 20.20 estima que la eficiencia que aportaría la implantación de las TIC en la economía española generaría unos ahorros de más de 600.000 millones de euros en 2020, además de unos 65.000 millones de euros en nuevos ingresos derivados de la creación de empresas y la creación de unos 218.000 nuevos puestos de trabajo en el país.
Desde un punto de vista social, no solo destacan las TIC como generadoras de nuevos empleos y trabajo de calidad sino también como un factor de cambio en la forma en la que las personas se relacionan con su entorno, facilitando la comunicación y la integración social. La flexibilidad que aporta el teletrabajo, las ventajas del e-learning o el valor añadido para pacientes y personal médico que aporta la teleasistencia son sólo algunos de los beneficios que ofrece la aplicación de la innovación tecnológica al día a día de las personas, tanto en su esfera privada como profesional.
Y por último, en lo que al medio ambiente se refiere, las nuevas tecnologías ayudan a un consumo más racional y eficiente de los recursos naturales y a la reducción de la emisión de gases de efecto invernadero a la atmósfera, lo que podría suponer una disminución de emisiones de 36,76 MtCO2 en 2020, según el análisis.
En definitiva, las TIC suponen una oportunidad para el crecimiento que no se puede desaprovechar, más aún en un contexto económico tan difícil como el actual. Invertir en tecnología e innovación es invertir en riqueza y desarrollo . Por ello, desde el Club de Excelencia en Sostenibilidad pretenden continuar promoviendo todas las recomendaciones en este sentido recogidas en el informe 20.20 para, en palabras de su Secretario General, Juan Alfaro, “ubicar España a nivel internacional como un modelo ejemplar de digitalización y virtualización”.