Vivimos en la era de los datos. Generamos datos al enviar un WhatsApp, al grabar un vídeo, al realizar una fotografía.
Pero también generamos datos al movernos por una ciudad, valorar locales en portales de ocio, leyendo el periódico o buscando por internet. ¿Qué dicen mis datos sobre mí?
El rastro de datos que producimos al navegar por la red, al hacer uso de aplicaciones e incluso al usar el transporte público dice mucho sobre nuestro comportamiento, patrones, gustos e incluso identidad. Es algo que saben las compañías como Google, Twitter o Facebook. ¿Qué saben ellos de mí?
Algunas curiosidades sobre tu presencia ‘online’
Realizamos un viaje y subimos las fotografías en tiempo real a Instagram, a Google Maps o a Booking, por poner algunos ejemplos de redes. Eso no solo significa que estas apps conocen nuestro recorrido, sino que este queda impreso en un registro público que cualquiera puede ver.
En otro ejemplo publicamos a diario fotos de nuestro gato en Twitter. Los dueños de esta red social tendrán las fotos, claro, pero gracias al fechado del microblogging podríamos dar pistas sobre nuestros hábitos diarios: cuándo nos despertamos, cuándo dejamos de estar activos, cuándo estamos en casa…
Los datos dicen mucho sobre nosotros, nuestros hábitos y nuestros gustos. Pero las regulaciones y leyes nos dan poder como usuarios. Primero, de conocer lo que saben las empresas sobre nosotros y, segundo, de poder descargar, modificar y borrar esos datos.
Saber lo que las empresas saben
El conocimiento que las empresas tienen sobre nosotros es accesible para nosotros, o al menos debería serlo, por ley. Las leyes europeas y españolas protegen a los usuarios dándoles el poder de gestionar en cierto modo su huella digital. Yo puedo saber lo que Google, Facebook o Twitter saben de mí.
A estos datos sobre cada uno de nosotros, que las plataformas usan por motivos tan diversos como dar un mejor servicios u ofrecer publicidad afín, suelen llamarse “datos”, “información” o “archivo”. Veamos cómo descargar nuestro archivo de las redes más conocidas.
Cómo descargar nuestro archivo de Twitter
Iniciamos sesión con nuestra cuenta de Twitter y pulsamos los tres puntos horizontales (···) para acceder a “Configuración y privacidad”. En “Cuenta” elegimos “Tus datos de Twitter”. Allí veremos una casilla donde ingresar nuestra contraseña y un botón donde se lee “Confirmar”. Aquí la ruta rápida.
Al cumplimentarlos y pulsarlo se preparará nuestro archivo, que puede tardar unos minutos. Estos serán enviados a nuestro correo electrónico, por lo que no importa desde dónde realicemos la operación (navegador, app, ordenador o móvil). Algunos archivos pueden ocupar bastante información.
Cómo bajar nuestro archivo de Facebook
Entramos en Facebook y buscamos la flecha que se parece a ▼. Pulsamos sobre “Configuración” y luego en la opción “Tu información de Facebook”. Dejamos aquí la ruta directa.
Finalmente, haremos clic en “Descarga tu información” y luego en “Crear archivo”. De nuevo, puede tardar bastante, especialmente si somos muy activos en la red social o llevamos mucho tiempo en ella. Al poco podremos descargarlo.
Cómo descargar nuestro archivo de Instagram
Instagram es una red social propiedad de Facebook, pero sus datos están almacenados aparte. Para visualizarlos entraremos en nuestro Instagram, pulsamos en el icono de nuestro usuario y luego en la rueda dentada. Desde allí accedemos al panel de “Privacidad y seguridad”. La ruta rápida es esta.
Allí pulsamos “Solicitar descarga” y escribimos nuestra contraseña. Una vez realizado este último paso, solo queda esperar a que se procese el archivo. Al haber muchas fotografías y vídeos es posible que pese más que el de otras redes sociales.
Los datos de Google, los más fáciles de visualizar
El acceso de usuario a nuestros datos de Google es un ejercicio de transparencia ejemplar. Google es una de las empresas que más sabe de nosotros, pero también la que mejor nos informa de lo que sabe.
Si quieres acceder a ellos solo tienes que iniciar sesión en Google, pulsar sobre tu icono y seleccionar “Cuenta de Google”. Allí llegarás a un panel desde donde podrás gestionar toda la información que esta empresa sabe de ti. Allí veremos un botón que indica “Descargar tus datos”. La ruta rápida es esta.
Como ejemplo personal, al acceder al Panel de Control de Google veo que el servicio que más uso es Gmail, con 10.735 correos, todos ellos descargables en varios formatos, que conoce mi dirección y rutas por la Cronología de Google Maps y que mi actividad web está activada.
Resulta imposible resumir todos estos conceptos y sus más de dos docenas de servicios. Sin embargo es importante destacar que podremos bajarnos todo o tan solo una parte. Para cada servicio, como el caso de Calendar, podremos visualizar nuestra información y exportarla a otros servicios.
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