La tecnología ha mejorado nuestra vida, sin duda. Y en tiempos de pandemia ha quedado más demostrado que nunca. Gracias a las videollamadas, podemos estar en contacto con nuestros seres queridos a distancia, la conexión a internet nos permite teletrabajar y seguir generando ingresos e incluso muchas personas han optado por emprender y mantener un negocio exclusivamente online.
Pero todo tiene su cara y su cruz, y la tecnología no iba a ser menos. Un uso incorrecto de la tecnología puede cambiarnos la vida para mal. El ciberacoso, las estafas e incluso los accidentes están a la orden del día y, aunque se señala como culpable a la tecnología, lo cierto es que el verdadero verdugo es el uso que, en ocasiones, hacemos de ella.
Ciberacoso, el enemigo de los adolescentes
Es cierto que nadie está exento y que el ciberacoso puede ocurrir a cualquier edad. Pero las cifras demuestran que el colectivo más vulnerable es el de los adolescentes. Conductas como el sexting y los mensajes y fotografías de contenido erótico son cada vez más habituales y han propiciado una nueva forma de relacionarse. Sin embargo, también hay personas que sufren ciberacoso en forma de amenazas de otro tipo o incluso de control por parte de sus parejas.
Según el ‘Informe de Sostenibilidad 2019 de Orange’, el 25% de las chicas reconoce haber sufrido control abusivo a través del móvil, mientras que el ciberacoso ha aumentado un 65% en España en los últimos años.
Accidentes: atención a conductores y peatones
Muy peligroso es también el hecho de usar el móvil al volante. Escribir un mensaje multiplica por 23 el riesgo de sufrir un accidente, según datos de dicho informe.
Pero no solo quien conduce está en riesgo. El peatón también debe cuidarse y tener en mente que, mientras está en la calle, lo más importante es concentrarse en observar el entorno. Ir distraído mirando el móvil o utilizar auriculares multiplica también el riesgo de sufrir un accidente. Algunos fabricantes han introducido tecnologías como la cancelación de ruido dinámica para dejar pasar el sonido del tráfico.
Estafas: la necesidad del sentido común
Otro de los problemas de la tecnología son las estafas. Estos fraudes se valen de herramientas como WhatsApp o el correo electrónico para hacernos caer en trampas como el phishing (suplantación de identidad) y aprovechar la oportunidad para robar nuestros datos, ya sea para un tema publicitario o, en el peor de los casos, para obtener información sensible como numeración de tarjetas de crédito o credenciales de acceso a la banca electrónica.
Lo más importante en este caso es que antes de pinchar en un enlace, abrir un archivo o dar cualquier dato personal el usuario esté totalmente seguro de quién está detrás de la pantalla.
Por un uso Love de la tecnología
Orange ha lanzado una campaña enfocada a sensibilizar y generar debate en torno a estos y otros problemas que pueden surgir en el marco de la tecnología. Un mal uso de la tecnología tiene peligros como el ciberacoso, las estafas o los accidentes de tráfico, entre otros, y mediante un formato muy popular, el vídeo, se trata de mostrar ciertas situaciones en las que cualquier persona se puede ver envueltas.
Es interesante que estos temas de actualidad dejen de ser tabú en el seno familiar y se trate de educar a los más jóvenes, siempre desde el conocimiento y sabiendo que la tecnología tiene muchísimas ventajas y no se puede (ni se debe) tratar de vivir al margen de ella, pero sí es importante utilizarla con responsabilidad y evitando ciertos riesgos.
Por Noelia Hontoria
Imágenes | Nguyễn Lê Hoài Châu/Unsplash, Eliott Reyna/Unsplash
