Los móviles plegables son el ejemplo más cercano de futuro que los usuarios pueden tener entre sus manos. Lo que hasta hace poco parecía una idea de película de ciencia ficción, un prototipo que nunca saldría al mercado, ya es una realidad firme.
Corría el año 2019, en un mundo prepandémico, cuando Samsung se atrevió a materializar lo que, para aquel entonces, era una auténtica excentricidad. La última Coca-Cola en el desierto o, mejor dicho, la primera piedra preciosa del cofre de un tesoro que todavía hoy, tres años después, tiene mucho más por ofrecer.
La jugada no salió del todo bien y los reportes de fallos de calidad del Samsung Galaxy Fold hicieron que naciera ‘muerto’. Sin embargo, esto le sirvió a la compañía (y, por qué no decirlo, también a su competencia) para aprender de los errores y dirigir los esfuerzos hacia lo que hoy son los móviles plegables: dispositivos resistentes y que ofrecen una experiencia de uso a la altura de lo esperado.
El mercado ya no lo domina un solo modelo, existen varios fabricantes que se han subido al carro de los smartphones que pueden doblar su pantalla. Sin embargo, si la penetración en el mercado no es mayor a día de hoy es por un enemigo común: el precio. Todavía no se ha democratizado el precio de estos dispositivos y sigue siendo un obstáculo para el consumidor final.
Que es un nicho de mercado en auge es algo que no se puede dudar a la vista de los datos que se han recogido en 2021. Según datos de la Display Supply Chain (DSCC), la distribución de móviles plegables creció de manera exponencial en la segunda mitad del año 2021, como se puede ver en esta gráfica.
Samsung y Honor, en cabeza en la carrera de los móviles plegables
Entre los dispositivos que destacan actualmente entre la oferta de móviles plegables hay dos fabricantes que están despuntando: Samsung y Honor.
Samsung ofrece dos interesantes alternativas que aprovechan esta tecnología para cubrir dos tipos de necesidades diferentes: reducir el tamaño del equipo o expandir el tamaño de la pantalla.
Para el primer propósito, el Samsung Galaxy Z Flip3 5G es la mejor opción, con un precio que no difiere demasiado de otros smartphones de gama prémium. Con una apertura tipo concha, dispone de dos pantallas. La pantalla interior flexible ofrece 6,7 pulgadas con tecnología Dynamic AMOLED de 120 Hz y una resolución de 2.640 x 1.080 píxeles, mientras que la exterior, una pantalla enfocada a visualizar notificaciones sin abrir el dispositivo, cuenta con un tamaño de 1,9 pulgadas, tecnología Super AMOLED de 60 Hz y resolución de 260 x 512 píxeles. Para garantizar la resistencia, dispone de cristal Gorilla Glass Victus y certificado IPX8. Su hardware también está a la altura de lo esperado, con un procesador Snapdragon 888, 8 GB de RAM, cámara trasera de 12 MP + 12 MP, cámara frontal de 10 MP y batería de 3.300 mAh con carga rápida de 15 W.
La segunda gran apuesta de Samsung es el Samsung Galaxy Z Fold3 5G. En este caso, la pantalla se despliega en forma de libro hasta alcanzar las 7,6 pulgadas con tecnología Infinity Flex Display Dynamic AMOLED 2X con tasa de refresco 120 Hz. La exterior no se queda atrás y ya de por sí cuenta con una diagonal contundente: 6.2 pulgadas, también con tecnología Dynamic AMOLED 2X con 120 Hz. La resistencia que ofrece es IPX8, amparada en un cristal Gorilla Glass Victus y un cuerpo de aluminio.
¿Qué hay de su apartado multimedia? Ofrece una triple cámara principal de 12 MP + 12 MP + 12 MP, una cámara exterior de 10 MP y otra interior de 4 MP. El sonido estéreo firmado por Dolby Atmos ofrece una experiencia envolvente cuando se utiliza el móvil para jugar y ver películas y documentales. Su ficha técnica se completa con un procesador Snapdragon 888, 12 GB de memoria RAM y batería de 4400 mAh, con carga rápida de 25 W, carga inalámbrica de 11 W y carga reversible de 4,5 W.
Por último, mirando de cara a un futuro muy próximo, toma el protagonismo el recién anunciado Honor Magic V. En este caso, la pantalla interna cuenta con 7,9 pulgadas, tecnología OLED y resolución 2.272 x 1.984 píxeles y una tasa de refresco de 90 Hz. Por su parte, la pantalla interna también es generosa, con 6,45 pulgadas, resolución 2.560 x 1.080 píxeles y tecnología OLED. En este caso, la tasa de refresco del display asciende a 120 Hz.
Y si las pantallas ya cumple con creces las expectativas, el resto de sus especificaciones técnicas tampoco decepcionan. El procesador saca músculo con el recién presentado Snapdragon 8 Gen 1, mientras que el apartado gráfico lo capitanea la GPU Adreno 730. La memoria RAM es de 12 GB y el almacenamiento interno llega servido en dos sabores: 256 GB o 512 GB. Este móvil 5G despunta también en tema fotográfico, gracias a su cámara trasera de 50 MP + 50 MP + 50 MP + dTOF. La cámara delantera tampoco se queda atrás y ofrece 42 MP. Por último, la batería ofrece una excelente autonomía gracias a sus 4750 mAh de capacidad y su carga rápida de 66 W.
Por su parte Huawei también tiene un modelo plegable entre su catálogo. Su apuesta es el Huawei P50 Pocket, cuya bisagra multidimensional está reforzada con materiales innovadores que se pliegan para caber en todas partes y se abren sin arrugarse, lo que permite que el teléfono pase de tener un tamaño de bolsillo a transformarse en un smartphone de pantalla completa de primera calidad.
La pantalla principal del Huawei P50 Pocket cuenta con un panel OLED de 6’9 pulgadas que aporta una resolución FULL HD+ de 2790×1188 píxeles mientras que la pantalla exterior lleva un panel OLED circular de 1,04 pulgadas que nos permite acceder a diferentes servicios del teléfono sin necesidad de desplegarlo en su totalidad.