Cómo proteger tu empresa ante las estafas con IA

Aprende a cómo proteger a tu empresa de las estafas por inteligencia artificial

Empresas

No hay duda de que la inteligencia artificial está revolucionando el funcionamiento de las empresas, desde la automatización de tareas hasta la toma de decisiones basada en datos. Sin embargo, también ha abierto nuevas puertas al fraude digital. Las estafas con IA se han convertido en una amenaza real, especialmente para pequeñas empresas y autónomos que no siempre cuentan con sistemas de seguridad avanzados.

Estafas con IA

Estafas con IA: Cuáles son y cómo prevenirlas con sencillos consejos

Leer más

Detectar y frenar este tipo de ataques se vuelve cada vez más difícil, ya que las técnicas utilizadas por los ciberdelincuentes evolucionan a gran velocidad. En este contexto, proteger tu empresa ante las estafas con IA no solo es recomendable, sino imprescindible para evitar pérdidas económicas y daños a la reputación.

Ver esta publicación en Instagram

Una publicación compartida de Orange España (@orange_es)

El deepfake y otras estafas al alza con IA

Una de las amenazas digitales más sofisticadas y preocupantes en la actualidad es el uso de deepfakes y otras estafas basadas en inteligencia artificial. Estas tecnologías permiten generar imágenes, vídeos o audios falsificados con un realismo sorprendente, lo que abre la puerta a múltiples formas de fraude. A diferencia de las técnicas tradicionales, los deepfakes son capaces de imitar de manera casi perfecta la apariencia y la voz de una persona, lo que los convierte en una herramienta peligrosa en manos de ciberdelincuentes.

Uno de los usos más comunes de estas técnicas es la creación de vídeos falsos en los que figuras públicas, directivos o incluso familiares aparecen diciendo o haciendo cosas que nunca ocurrieron. En entornos empresariales, se han detectado intentos de estafa en los que un vídeo manipulado de un CEO solicita transferencias urgentes o confidenciales. La apariencia de legitimidad en estos contenidos puede engañar incluso a empleados bien formados, provocando pérdidas económicas graves.

Además del vídeo, también se utilizan audios generados por IA para imitar voces con gran precisión. Estas grabaciones falsas pueden utilizarse para suplantar identidades en llamadas telefónicas y manipular a interlocutores con fines fraudulentos. Incluso han surgido aplicaciones capaces de recrear conversaciones escritas, simulando correos electrónicos o mensajes de texto con el estilo de escritura de una persona real.

Estas técnicas están evolucionando a gran velocidad, y su accesibilidad ha hecho que el fraude digital esté al alcance de muchos más actores malintencionados. La combinación de realismo técnico y facilidad de uso convierte a estas herramientas en una amenaza difícil de detectar y cada vez más común.

Según el informe «Cyberthreat Defense Report 2024« de CyberEdge Group, más del 60% de las pequeñas empresas han sufrido intentos de fraude cibernético en el último año. La falta de infraestructura especializada y personal dedicado a la ciberseguridad aumenta el riesgo de ser víctima de estafas con IA.

Proteger tu empresa ante las estafas con IA empieza por definir protocolos internos que ayuden a detectar situaciones sospechosas. Es fundamental establecer canales oficiales para las comunicaciones financieras, asegurarse de que toda solicitud de transferencia sea verificada por más de una persona y limitar el acceso a información sensible.

Un equipo preparado es una de las mejores barreras ante los ciberataques. Capacitar al personal en ciberseguridad, reconocer patrones comunes de fraude y fomentar la cultura de la prevención son acciones clave. Esto es especialmente importante en áreas como atención al cliente, contabilidad o recursos humanos.

La IA puede poner en jaque la continuidad de tu empresa

Utilizar herramientas de detección de amenazas potenciadas por IA

Si bien la inteligencia artificial puede ser una amenaza, también es una aliada. Existen soluciones en el mercado que ayudan a proteger tu empresa ante las estafas con IA mediante la detección de anomalías en tiempo real. Estas herramientas analizan patrones de comportamiento, correo electrónico, y conexiones entrantes para advertir de posibles ataques.

La doble autenticación y el uso de certificados digitales son métodos eficaces para blindar el acceso a cuentas y documentos importantes. De igual manera, establecer permisos segmentados evita que un posible ataque comprometa toda la estructura interna de la empresa.

Muchos fraudes se producen por vulnerabilidades en programas o sistemas operativos desactualizados. Aplicar parches de seguridad de forma regular y hacer auditorías periódicas minimiza el riesgo de ser blanco de una estafa con IA. Las plataformas desprotegidas son el objetivo preferido para este tipo de delitos.

Contar con una auditoría externa es una forma efectiva de detectar debilidades. Empresas especializadas pueden simular ataques o realizar análisis de penetración para comprobar el nivel de resistencia de tu infraestructura digital ante fraudes generados por inteligencia artificial.

Uno de los fraudes más frecuentes en comercios digitales es la simulación de devoluciones a través de documentos o comunicaciones falsificadas. La IA facilita la creación de mensajes aparentemente válidos, incluso imitando el lenguaje habitual de la empresa. Establecer procesos automatizados de validación y seguimiento puede reducir drásticamente este tipo de amenazas.

Estafas dirigidas o el aumento de los ataques personalizados

El «phishing» tradicional ha dado paso al «spear phishing», donde los mensajes se personalizan gracias a la IA para aumentar su credibilidad. Según un informe de Proofpoint 2024, este tipo de ataques ha crecido un 30% en Europa en el último año. Las pequeñas empresas son especialmente sensibles porque suelen confiar en estructuras de comunicación menos formalizadas.

Proteger tu empresa ante las estafas con IA no solo implica prevenir, sino también reaccionar a tiempo. Ante cualquier sospecha, es fundamental contar con un protocolo de actuación, que incluya la notificación inmediata a las autoridades, la desconexión de sistemas comprometidos y el seguimiento de posibles daños.

El objetivo es claro: construir un entorno digital más seguro, donde la tecnología beneficie a los negocios sin poner en riesgo sus activos más valiosos. Frente a amenazas cada vez más sofisticadas, la prevención es la mejor defensa.

Archivado en
Subir