La nueva cultura del entretenimiento ha cambiado de manera drástica la pantalla en la que se consumen los contenidos. El usuario está acostumbrado a ver sus películas, series, y cadenas de televisión, cuándo y dónde quiere. El televisor ha dejado paso a móviles, tablets y ordenadores.
En esta transformación hacia el disfrute del contenido a la carta, con internet como catalizador, es importante tener presente que se han vivido décadas en las que se han gestado y evolucionado formatos de archivo que permiten reproducir vídeo y audio en nuestros dispositivos.
Han triunfado aquellos formatos que ofrecen la mejor relación entre calidad y peso de los contenidos. No cabe duda de que AVI ha sido, y sigue siendo, uno de los nombres clave.
Qué es el formato AVI
Nos tenemos que remontar a noviembre de 1992 para descubrir el formato de archivo AVI, que son las siglas en inglés de Audio Video Interleave.
Sus responsables fueron los ingenieros de Microsoft, que lo lanzaron con el principal objetivo de proporcionar un formato que aunara audio y vídeo digital para Windows. Siendo más específicos, nos tenemos que remontar hasta Windows 3.1.
Con rapidez se convirtió en la opción más popular entre los usuarios de PC de todo el mundo, por su facilidad para compartir archivos de vídeo entre usuarios, pero lo que lo hizo extenderse con facilidad fue la explosión de internet.
Cómo funciona el formato AVI
Más que un formato de archivos se debería describir como un contenedor multimedia, que almacena simultáneamente un flujo de datos de vídeo y varios de audio. Al poder contener varias pistas, permite introducir varios idiomas.
El formato de estos flujos puede cambiar, y dependen de un códec externo que el reproductor debe tener instalados. Por ejemplo, el vídeo puede utilizar códecs como DivX o XVID, mientras que el audio puede usar MP3 o AC3.
Para que los flujos sean reproducidos es necesario que se almacenen de manera entrelazada, de ahí el interleave del nombre del formato: Audio Video Interleave.
¿Qué tamaño tienen los archivos en formato AVI?
Va a depender de la calidad del vídeo y el audio contenido en el archivo AVI, de los códecs elegidos. Es posible poner un ejemplo básico, como que un vídeo HD con una hora de duración y calidad de sonido alta ocupe poco más de 6 GB. No es el punto fuerte del formato AVI.
Ventajas y desventajas del formato AVI
Siempre teniendo en cuenta que es un formato veterano, que se enfrenta con multitud de opciones que han ido apareciendo adaptados a la era de internet, es posible valorar múltiples ventajas:
- La gran variedad de códecs disponibles para introducir dentro del formato de archivos AVI.
- Es posible conseguir una fidelidad de audio y vídeo muy alta, tanto que se puede utilizar para archivos maestros.
- No necesita de un hardware especial para ser reproducido.
- Tanto a nivel doméstico como profesional, la gente está familiarizada con el formato. Está disponible tanto en Windows como en otros sistemas.
- Existe mucho contenido creado en este formato.
Sus desventajas ante la competencia
La realidad es que existen multitud de formatos contenedores de vídeo y audio, entre los que hay que destacar MP4. Es una opción que puede usar diferentes compresiones, por lo que ofrece una eficiencia mejor en el tamaño del archivo con una calidad similar. Algo muy importante a la hora de mover los contenidos en la red de redes.
Otra ventaja de MP4 es la compatibilidad, ya que puede ser reproducido por muchos dispositivos sin la necesidad de aplicaciones especiales.
Cómo reproducir un archivo AVI
Es interesante conocer que en el momento que nació AVI, en Windows 3.1, también lo hizo el reproductor más famoso de la casa: Windows Media Player. Desde entonces han hecho camino juntos, siendo siempre la opción más a mano en el entorno Windows.
La otra opción recomendable es VLC Player de VideoLAN, una aplicación muy extendida en todas las plataformas de escritorio, que incluso está disponible para móviles. Su principal valor está en la sencillez de uso y que nos permite reproducir todo tipo de archivos de manera gratuita.
Entre las alternativas que podemos encontrar está Avidemux Sourceforge, que es un conversor gratuito y sencillo de usar. También destacan los editores de vídeo Kdenlive y OpenShot.
Desde el punto de vista profesional, también hay opciones que trabajan con el formato AVI sin mayor problema. Hablamos de nombres como Premiere Pro de Adobe, que permiten la edición de vídeo en calidad 4K y el audio en distintos fragmentos de pistas.
Por Kote Puerto
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