Un conjunto de pequeños gestos pueden lograr increíbles hazañas. Entre todos los habitantes del planeta podemos conseguir que la huella de carbono y el cambio climático reviertan su actual tendencia. Si bien es cierto que las grandes empresas son las que más deben arrimar el hombro para apostar por energías renovables y diseñar un programa de trabajo que incluya acciones ecológicas, también lo es que cada persona tiene que aportar su grano de arena.
Según una encuesta elaborada por la operadora estadounidense Ting y que rellenaron más de 3000 personas, los usuarios tardan entre dos y cinco años en cambiar de móvil. Las tres principales razones para renovarlo son que ya no funciona tan bien como antes, que el móvil está roto o averiado y que está obsoleto.
Uno de los actos personales que pueden ayudar a frenar el avance del cambio climático pasa por comprar un móvil reacondicionado. En ‘El Economista’ se hacen eco de un informe de la consultora estadounidense IDC que asegura que el mercado del móvil de segunda mano ha crecido un 17%. Y es una tendencia al alza que batirá récords con la llegada de la conectividad 5G.
Dos de los principales beneficios de comprar un móvil reacondicionado son el ahorro económico que suponen y frenar el impacto medioambiental de adquirir uno nuevo. El coste ecológico de fabricar un solo smartphone es bastante elevado. Si en lugar de comprar uno recién salido de fábrica se le diese la oportunidad a otro que puede ser casi nuevo, se estaría haciendo bastante por el planeta.
Para fabricar un teléfono móvil se necesitan recursos naturales. Muchos de ellos son minerales, cuya extracción supone un impacto desfavorable en la naturaleza. Además, se emite CO₂ y se consumen otros recursos imprescindibles para la vida humana como es el agua. Todo suma. Y si se opta por la compra de un móvil reacondicionado se estará evitando la fabricación de uno nuevo.
Qué quiere decir que un móvil es reacondicionado
En resumen, se podría decir que todos los móviles reacondicionados son de segunda mano, pero no todos los móviles de segunda mano son reacondicionados. Alguien puede comprar a través de apps de venta de productos usados un móvil a un particular. Se trataría en este caso de un teléfono usado. No tiene más garantías que la palabra del vendedor. En cambio, un móvil reacondicionado ha pasado por un servicio técnico y se ha ‘vuelto a acondicionar’ para su puesta a la venta.
Un móvil reacondicionado es, básicamente, un teléfono que ha sido devuelto a la empresa que lo vendía y puesto de nuevo a la venta. Se pueden encontrar desde terminales prácticamente sin uso a otros en los que la garantía estaba a punto de terminar. También se consideran móviles reacondicionados los que han estado expuestos en tienda. Incluso aquellos cuya caja ha sufrido algún desperfecto sin haber salido del almacén.
El cliente debe estar informado de las condiciones en las que está el teléfono reacondicionado. Ojo, no al estado funcional, que debe ser perfecto y como recién salido de la caja, sino el estado estético. Las sitios que venden móviles reacondicionados suelen clasificarlos según su apariencia. Cuanto más nuevos parezcan o más componentes originales incluyan en la caja, mayor será su precio. Sin embargo, los más económicos presentarán algunos defectos. Estos, sin embargo, nunca impedirán el buen funcionamiento del aparato.
Dónde comprar un móvil reacondicionado
El cliente interesado en adquirir uno de estos teléfonos reacondicionados puede pasarse por cualquier tienda Orange y consultar los que en ese momento tengan disponibles. En este enlace se puede consultar la tienda Orange que quede más cerca del domicilio.
Redactado por Antonio Bret
