Las telecomunicaciones han sido un enorme respaldo para la economía y las relaciones personales durante el confinamiento derivado de la COVID-19.
Nos han permitido mantener la actividad laboral, así como la relación con la familia y el pulso de la realidad. Hablamos con Noelia Miranda, responsable de desarrollo técnico del Colegio Oficial de Ingenieros de Telecomunicación.
La red de telecomunicaciones es un artilugio complejo, horizontal y casi invisible, pero ubicuo. ¿Qué rol habéis desempeñado durante la pandemia y el confinamiento?
Estamos muy satisfechos y orgullosos de que la profesión a la que representamos haya sido el soporte de la actividad económica durante estos meses. Gracias a esa red, toda aquella actividad económica que ha podido mantenerse lo ha hecho, como hemos visto con el teletrabajo.
También ha servido para conectar familiares, amigos, etcétera. Imaginémonos lo que hubiera sido la pandemia y el encierro sin servicios de telecomunicaciones que nos permitieran, primero, saber qué estaba pasando (aunque el exceso de información a veces tampoco sea ideal) y, segundo, sin poder tener contacto con tus familiares y seres queridos. Hubiese sido un escenario inimaginable.
La profesión a la que representamos haya sido el soporte de la actividad económica durante estos meses
No solo se ha digitalizado la parte empresarial, también han despuntado las videollamadas a familiares.
De hecho es casualidad, pero hemos renovado la imagen corporativa del colegio y el lema actual es “la emoción de conectar”. Ha sido bastante oportuno aunque no fue intencionado. Nunca ha sido tan importante poder estar en contacto con las personas como lo es en este momento. También para las personas que han estado en el hospital, por tener ese contacto o esa última despedida gracias a las telecomunicaciones.
¿Cómo lo habéis vivido vosotros? ¿Os habéis trasladado tras la pantalla?
Sí, como organización estamos todos en formato teletrabajo. Creo que todas las empresas tenían un poco de miedo al cambio, no sabían qué implicaciones y respuestas iba a tener, por ejemplo por parte de los empleados, si iban a responder adecuadamente… Pero me da la impresión de que la mayor parte de las empresas se han dado cuenta de que su actividad ha seguido, y que la productividad incluso ha aumentado. Y lo más importante: las personas han dado todo y más.
Diría que ha venido para quedarse. Habrá un cambio a nivel organizativo en las empresas. Creo que el formato tradicional de ‘todos en la oficina’ debe cambiar. Habrá un porcentaje importante que se quede en este formato de teletrabajo, y otros que tendrán una modalidad mixta: algún día en la oficina y otro en casa.
Algunas estimaciones apuntaban a que el 50% del teletrabajo conseguido podría ser permanente.
Hace unos días el Banco de España estimaba que un 30% de las personas mantendrían este formato. Habrá gente que se quede en teletrabajo porque son puestos perfectamente compatibles, y otra que se traslade a una modalidad mixta como los pilotos que ya había.
Es interesante lo rápido que nos hemos adaptado cuando ha hecho falta.
Hay por ahí algún meme que decía que la verdadera transformación de las empresas lo ha provocado el coronavirus.
Hay una serie de implicaciones a nivel ético, económico y legal que se van a tener que regular
Algunas empresas que antes lo evitaban, ahora han adoptado el teletrabajo y se han sorprendido de mantener la productividad.
Se ha mantenido e incluso ha aumentado en algunos sectores. Es verdad que esto del teletrabajo se tendrá que regular. Habrá que tener en cuenta, por ejemplo, las implicaciones económicas que tiene para el empleado al estar poniendo la conexión a internet, el suministro eléctrico, su infraestructura, etcétera.
Para las empresas supondrá un ahorro importante de costes: espacio, material, prevención de riesgos laborales (los de tu casa no son los mismos que si te desplazas). Hay una serie de implicaciones a nivel ético, económico y legal que se van a tener que regular.
Uno de los puntos más interesantes de estos días ha sido la alta demanda de perfiles de Telecomunicaciones e IT [Adecco]. ¿Lo habéis notado?
No tenía constancia del dato, pero no me sorprende. Las telecomunicaciones y todo el trabajo tanto a nivel técnico como de gestión que puede desempeñar un ingeniero de telecomunicación son muy transversales. Las ‘telecos’ son la columna vertebral de la economía digital o de la economía que viene.
Después de esto, ¿valoraremos más a los telecos? Porque estáis un poco en la sombra. Prestáis un servicio esencial pero es un servicio ‘mágico’ que llega a través de ondas invisibles.
Es algo que siempre digo: si es vía radio son ondas radioeléctricas que no se ven, y los cables de fibra óptica los soterramos. El único elemento visible son las antenas. Es verdad que no construimos puentes o grandes autopistas visibles, como los ingenieros de caminos. También que esto ha servido para poner de relieve la importancia que tienen las telecomunicaciones en la sociedad actual.
Porque la red ha podido responder a una demanda nunca vista.
A pesar de que todas las plataformas de vídeo dispararon su tráfico, las redes de telecomunicaciones han respondido muy bien. Es interesante: cuando veías los gráficos de tráfico se veían los picos. A las ocho de la tarde, con los aplausos, caían las cifras de todos los operadores.
Si de algo podemos presumir en España es de tener una de las mejores redes de fibra óptica que hay a nivel europeo. Y a nivel de cobertura móvil no estamos nada mal.
¿Y cómo respondemos a los bulos del 5G y la salud?
Las fake news son una losa con la que vamos a tener que cargar a partir de ahora. Internet se desarrolla y todo el mundo puede opinar e informar, pero también desinformar. Se ponen al mismo nivel informaciones científicas con informaciones que no están respaldadas por ningún organismo.
Este tema, con la inteligencia artificial, va a ser un verdadero problema: no va a haber manera de distinguir una información veraz de otra que no lo es. Esto tiene unos riesgos geopolíticos, económicos y sociales muy elevados. Imaginemos que sale una noticia de que un país ataca a otro y, a la vez, lo contrario.
Con el 5G está pasando esto. El COIT ostenta la secretaría técnica del Comité Científico de Radiofrecuencias y Salud (CCARS), y hemos dado soporte a un informe en el que el comité confirma que no hay ninguna evidencia científica de riesgo del 5G. Incluso tenemos una sección de desmentidos y colaboramos con Maldita Ciencia, Newtral y Factual de France Press.
Imágenes | Noelia Miranda
Por M. Martínez Euklidiadas