Nómadas digitales: trabajar en cualquier lugar no siempre es un sueño

Innovación

A medida que la tecnología avanza, van apareciendo nuevos conceptos. Pero pocos se han acercado tanto a definir cómo ha evolucionado nuestra relación con la tecnología como el de ‘nómada digital’. ¿Qué es exactamente un nómada digital?

El término hizo acto de aparición por primera vez en el libro superventas ‘The Week of 4 Hours’, escrito por Tim Harris, empresario y podcaster. En él, Harris planteaba la cuestión de que, hoy en día, cualquiera puede tener un negocio en internet. Y esto lleva al siguiente paso: poder trabajar desde donde se quiera. 

No echar raíces y poder tener la libertad de moverse por el mundo, mientras se tenga una buena conexión a la red. Un concepto del trabajo y de la vida en general que ha sufrido un enorme crecimiento gracias al teletrabajo y la capacidad de poder conectarnos en (casi) cualquier sitio. Tener el trabajo cerca de un domicilio fijo es una idea lejana para estos nómadas digitales.

Un estilo de vida que conecta más con la eficiencia laboral que con el presentismo: no se trata de permanecer en la oficina, sino de lograr un tiempo eficaz y productivo de trabajo, sea donde sea el lugar en el que el trabajador se encuentre.

Ser nómada digital: no es oro todo lo que reluce

La idea de una persona trabajando junto a una piscina en el hotel, tumbado en una hamaca y con un cóctel con sombrilla. Una imagen cliché que se suele asociar al nomadismo digital con demasiada frecuencia, aunque está totalmente disociada de la realidad. Las personas que se embarcan en este nuevo modelo de vida están bastante lejos de lo que se podría considerar unas vacaciones perpetuas.

Y es que no hay mejor manera de saber si uno puede ser nómada digital que, simplemente, probándolo. Pero, eso sí, despojándose de ese halo romántico que tiene este tipo de vida. Porque para muchos, el desarraigo vital, el no tener un domicilio fijo para poder desarrollar de modo eficaz una vida, no ya profesional, sino meramente social, puede suponer un verdadero problema.

Ventajas y desventajas de ser un nómada digital

Entre las principales desventajas que lleva consigo ser nómada digital encontramos los problemas técnicos y la falta de cobertura de internet, ya que en algunas zonas la conexión o bien tiene un precio desorbitado o, simplemente, no cumple con las mínimas exigencias para, por ejemplo, realizar una reunión virtual.

Una clara desventaja íntimamente relacionada con otra: no todos los lugares son idóneos para la actividad profesional. Ruidos, espacio limitado, distracciones… Ser nómada digital requiere una minuciosa planificación del próximo destino. Prevenir, en este caso, vale por mucho más que dos. Por no hablar del desfase horario y la soledad. No todo el mundo está preparado para este tipo de vida.

Sin embargo, ser nómada digital también tiene sus ventajas. Por ejemplo, el propio carácter del trabajo. Al poder hacerlo mientras se viaja, se podrán descubrir mil rincones en el mundo que, de otro modo, no se podría. Mundos y experiencias distintas: el nomadismo digital puede ser la opción predilecta para aquellas personas a las que les gusten los cambios y los retos y no les asusten los incidentes imprevistos.

Otra de las ventajas es que se pueden elegir los horarios laborales. Una flexibilidad que, aunque también aparece en autónomos con residencia fija, es un plus para aquellos que viajan, ya que dispondrán de la franja de tiempo que deseen para visitar un lugar remoto o cualquier otro emplazamiento atractivo.

Siendo nómada digital también se puede ahorrar. Hay países en los que el nivel de vida es más bajo y lugares en los que el alquiler es sumamente más asequible que en grandes urbes. Aunque, si los viajes son constantes, puede darse el caso contrario.

¿Qué profesiones se ajustan más a este modelo de vida?

El nomadismo digital es particularmente agradecido con ciertas profesiones liberales y de corte creativo como la fotografía. Es más, en este último caso, esta forma de vida se agradece.

Es indudable que si se quiere adaptar este estilo de vida, hay que ser freelance. Algunas profesiones típicamente relacionadas con ser nómada digital son la de programador, diseñador gráfico, fotógrafo profesional, copywriter y redactor web, traductor en línea y dueño de un comercio electrónico. Siguiendo los consejos de veteranos en esto de trabajar y viajar, quien se anime a probarlo tiene algo de camino avanzado. Pero no se trata de un camino de rosas y eso se ha de tener claro.

Redactado por Antonio Bret

Imágenes | Flickr (1), Pixabay (2), Piqsels (3), Flickr (4)

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