Casi todo el mundo tiene una mirilla en su casa, pero pocos saben que su invención corresponde al estadounidense Robert Williams Wood. En 1906 creó la primera mirilla para el hogar. No fue hasta la década de 1960 cuando empezó a implantarse en las puertas de las viviendas.
Hoy en día son un elemento imprescindible, pero también a las mirillas les ha impactado la era tecnológica. De hecho, cada vez es más frecuente ver las llamadas mirillas inteligentes, un accesorio con mucha utilidad y muy presente en los smart home.
¿Qué son las mirillas inteligentes?
Se trata de pequeños ‘ojos’ colocados en las puertas de las casas en el que se sustituye el tradicional cristal por una pequeña cámara y un conjunto de altavoz y micrófono (en algunos casos). Así, se permite ver quién está llamando al timbre sin necesidad de salir del dormitorio, desde la ducha e incluso sin estar en casa.
Algunos modelos también pueden tomar fotos y enviar alertas de detección de presencia, por lo que se convierten en un elemento de seguridad para el hogar.
Con esta vuelta de tuerca y con la tecnología al servicio de las necesidades del usuario, las mirillas inteligentes sirven de puente de comunicación entre los visitantes y los habitantes de la casa (o de la oficina o cualquier otro lugar en el que se coloque). Algunos modelos incluyen un videoportero, mientras que otros se controlan únicamente desde el móvil.
En cualquier caso, la utilidad es la misma en ambos casos: poder ver con perfecta nitidez quién se encuentra al otro lado de la puerta y decidir si se le permite el acceso o no. Cada modelo puede tener un funcionamiento diferente, pero lo más habitual es que se conecten al wifi de la casa.
Mirilla inteligente Ezvic DP1C: un modelo destacado y económico
Son muchas las grandes superficies, tiendas de bricolaje y tiendas de electrónica que ya venden mirillas inalámbricas inteligentes. La Tienda Online de Orange también permite comprar alguno de estos dispositivos, como, por ejemplo, la mirilla inteligente Ezvic DP1C. Se puede pagar al contado, sin tarifa ni permanencia, o en plazos con una cuota mensual mínima.
Se trata de un modelo que permite ver a los visitantes y hablar con ellos, incluso cuando el propietario no se encuentra en casa. Está formado por una mirilla fabricada en aleación de zinc, diseñada para que ajuste en el espacio convencional que suelen tener las puertas para este propósito. Es compatible con perforaciones que tengan un diámetro entre 16.5 y 50 mm y con puertas con un espesor entre 35 y 105 mm.
En esta mirilla se oculta una cámara gran angular de 104º, resolución de vídeo de 720 px, modo de visión nocturna hasta tres metros de distancia y alta resistencia para evitar que se pueda dañar desde el exterior.
Además, la propia mirilla es capaz de alternar, de forma automática en función de la exposición a la luz solar, entre el modo día y el modo noche, de manera que siempre se obtenga el mejor resultado de visión. Hay que tener en cuenta que, al ser totalmente inalámbrica, cuenta con una batería de litio recargable de 4.600 mAh, y que, aunque su autonomía es muy generosa, no hay que olvidarse de comprobar periódicamente que tenga batería para que no se desconecte nunca por este motivo.
Con detección de visitas y compatible con iOS y Android
Además de la propia mirilla, al comprar la Ezvic DP1C se incluye también un videoportero, una pantalla a color de 4.3 pulgadas en la que se puede ver en todo momento qué está sucediendo dentro del ángulo de visión que abarca la cámara. En cualquier caso, es el usuario quien puede decidir si hacer uso de este videoportero o si seguir los movimientos frente a la cámara desde el móvil, ya que es compatible con Android y con iOS.
Un detalle muy interesante de este modelo es que tiene detección de presencia de visitantes. Gracias a ella, el usuario puede recibir una alerta en caso de que alguien se pare frente a la puerta de la vivienda y así, desde el móvil, hablar con ellos, mediante el micrófono y el altavoz incluido.
Asimismo, se pueden capturar imágenes del exterior si se detectan visitas. Aunque la resolución es muy discreta (1 mpx), puede servir para identificar a la persona que se acerca al hogar, bien porque sea alguien conocido o porque lleve intenciones no demasiado buenas. La grabación de vídeo, por su parte, ofrece una muy buena calidad, a 720 px, con una alta nitidez y sin ruido en la imagen.
Por Noelia Hontoria
Imágenes | Orange