El uso abusivo de las tecnologías por parte de las y los menores es un hecho que preocupa en un gran número de hogares y centros educativos. Consolas, smartphones, tablets, ordenadores… son dispositivos que, desde edades cada vez más tempranas, son utilizados por un mayor número de niños y niñas.
La participación en redes sociales, estar en contacto permanentemente con el círculo de amistades, acceder a juegos, consumir contenidos digitales… son algunas de las actividades que realizan cada día los menores utilizando estos dispositivos. Si el número de horas diarias que utilizan es muy elevado podrían surgir problemas de diferente índole. Es importante que desde edades tempranas niños y niñas tomen conciencia de lo que puede ocasionar el uso abusivo o inadecuado para prevenir los riesgos asociados.
La adicción es uno de los peligros más graves que puede surgir con el uso desmedido de la tecnología, pudiendo ser necesaria la intervención de profesionales que ayuden al menor a superarla. Ansiedad, aislamiento social, depresión, irritabilidad, inestabilidad emocional… son algunos de los síntomas que se pueden presentar.
Estar alerta en el hogar y/o en el centro educativo permitirá identificar de forma temprana que se está haciendo un uso abusivo y evitar así la dependencia de estas tecnologías. En el artículo “¿Qué hacer si… Tienes sospechas de abuso o adicción a las TIC” se ofrecen algunas claves de cómo actuar.
Además de la adicción es necesario tener en cuenta otros riesgos a nivel físico y sensorial que pueden surgir con el uso continuado e incorrecto de los dispositivos tecnológicos.
Problemas en dedos, muñecas y brazos están siendo cada vez más frecuentes. Y es que las lesiones en tendones, articulaciones y ligamentos surgen con la realización de movimientos repetitivos durante largos periodos de tiempo. Teclear con el dedo pulgar, utilizar algunos dedos para manejar la consola, utilizar el ratón durante mucho tiempo, sujetar la tablet de forma inadecuada puede ocasionar molestias en las extremidades superiores.
Molestias en la vista (conjuntivitis, enrojecimiento de los ojos y cansancio ocular) también pueden presentarse con el uso prolongado de pantallas de visualización de datos, llegando incluso a ocasionar dolores de cabeza y fatiga.
Es muy importante que desde edades más tempranas se sensibilice a las y los menores en el cuidado de su cuerpo, haciendo un uso saludable de las tecnologías: Mantener una posición adecuada del cuerpo (ojos, manos, espalda, pies), evitar el uso de dispositivos tecnológicos durante periodos continuados de tiempo, estar alerta ante la realización de movimientos repetitivos, entre otras recomendaciones.
Las tecnologías han venido para quedarse y por eso es fundamental que las y los menores aprendan, cuanto antes, a utilizarlas de forma adecuada y saludable.
