El móvil que ya no quieres puede salvar vidas y ecosistemas

RSC

Solo en España se desechan 20 millones de smartphones cada año. Cuando los cambiamos por otros, raras veces nos paramos a pensar que estos móviles son recursos potenciales. Que pueden usarse para proteger las selvas tropicales, para salvar especies en peligro de extinción e incluso para llevar agua potable a cualquier rincón del mundo.

El tercer capítulo de la segunda temporada del podcast de Orange sobre sostenibilidad y tecnología, ‘Hola Planeta’, presenta una serie de iniciativas que transforman los móviles que ya nadie quiere en herramientas para proteger ecosistemas y ayudar a diferentes colectivos. Te presentamos algunas de las iniciativas que dan nuevas vidas a nuestros antiguos teléfonos.

Los oídos digitales de Rainforest Connection

Desde hace unos años, las selvas tropicales de diferentes puntos del mundo están llenas de guardianes. Estos se encargan de dar la voz de alarma en caso de escuchar sonidos de motosierras o disparos, provenientes, por lo general, de madereros y cazadores furtivos. Esto no tendría nada de particular de no ser porque estos guardianes no son personas, sino sistemas de vigilancia que funcionan gracias a los móviles que ya nadie quiere.

La ONG Rainforest Connection utiliza viejos smartphones para escuchar los sonidos de la selva. Los coloca en puntos en los que existe riesgo de tala y caza ilegal donde es muy complicado realizar tareas de vigilancia tradicionales. Gracias a la inteligencia artificial, el sistema puede identificar el sonido de las actividades ilegales y enviar un aviso a las autoridades o comunidades locales.

Las grabaciones de Rainforest Connection sirven también para llevar a cabo estudios sobre la biodiversidad de estos ecosistemas. La ONG lleva más de una década recopilando una verdadera biblioteca sonora de los sonidos de los bosques tropicales. Si tienes curiosidad, puedes escuchar cómo suenan diferentes selvas del mundo en tiempo real a través de la aplicación gratuita Rainforest Connection (disponible tanto para iOS como para Android).

Movilízate por la selva

La extracción de materiales como el coltán, necesarios para fabricar teléfonos móviles, ha llevado a la destrucción de selvas y otros ecosistemas de países como la República Democrática del Congo y ha generado conflictos que afectan a millones de personas cada año. Al mismo tiempo, la falta de sistemas de reciclaje y reutilización eficaces hacen que muchos de nuestros dispositivos terminen contaminando el medioambiente cuando llega el fin de su vida útil.

Sin embargo, existen opciones para hacer que el final de nuestros smartphones tenga un impacto positivo. La iniciativa Movilízate por la selva, del Instituto Jane Goodall España, por ejemplo, recibe móviles viejos que envía a empresas de reciclaje autorizadas. Con los fondos que obtiene a cambio, desarrolla proyectos educativos y de conservación de primates en África.

“Con esta campaña ayudamos a evitar el conflicto humano a la vez que protegemos los ecosistemas africanos”, explica Marisa Mariñán, coordinadora de la campaña a nivel nacional. Parte de los fondos se destinan al Centro de Rehabilitación de Chimpancés de Tchimpounga, donde conviven más de 150 animales supervivientes de ataques de cazadores furtivos y mafias que atrapan a las crías para venderlas, entre otros problemas. En los últimos años, el Instituto Jane Goodall España ha conseguido reciclar más de 120 000 teléfonos móviles en desuso.

Waterologies: agua potable gracias a un smartphone

¿Y si la solución para llevar agua potable a cada rincón del planeta estuviese en la batería de un smartphone? Esta es la premisa de Pure Water Box, un dispositivo de bajo coste capaz de potabilizar 150 litros de agua cada hora gracias a la energía que generan las baterías de los móviles. En total, puede depurar 3000 litros al día.

Pure Water Box es uno de los equipos inteligentes para el control y la potabilización de agua de Waterologies. Detrás de esta idea está Antonio Cuevas, quien comenzó a buscar soluciones a la falta de acceso a agua potable tras realizar un viaje a la India y conocer de primera mano el problema.

“Me di cuenta de que para poder potabilizar el agua necesitaba energía eléctrica, y la única energía eléctrica que tenía en mis manos era la de la batería de mi teléfono móvil”, explica Cuevas. Este pensamiento llevó al desarrollo de esta pequeña potabilizadora de bolsillo que, tras años de investigación, ha terminado siendo efectiva, autónoma y muy duradera.

Mi móvil por tus libros

“Si tienes un móvil que ya no utilizas, ahora puedes cambiarlo por semillas, libros escolares, bidones de agua, formación y recursos necesarios para que más personas puedan salir de la pobreza y vivir dignamente”, señalan desde Intermon Oxfam. Y es que esta ONG y Amnistía Internacional han llegado a un acuerdo con la empresa Movilbank para que reciclar y reutilizar smartphones se convierta en un gesto solidario.

La compañía se encarga de recibir teléfonos donados, que divide en función de su estado. Aquellos que todavía se pueden utilizar se ponen a la venta, mientras que los que ya no sirven son enviados a una planta de reciclaje. Con los fondos obtenidos, las dos ONG financian proyectos sociales, medioambientales y de defensa de los derechos humanos.

Si quieres saber más sobre cómo los móviles que ya no queremos pueden transformar el mundo, no te pierdas el último capítulo de Hola Planeta. 

Por Tania Alonso Cascallana

Imágenes | Momentum life/Shutterstock, Unsplash/Eutah Mizushima, Instituto Jane Goodall, Unsplash/Luis Tosta, Pexels/Dan Cristian Pădureț.

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