Orange invertirá 2,5 millones de euros en un proyecto de autoconsumo solar para más de 30 edificios e instalaciones en España

Sostenibilidad

Con motivo de la celebración del Día Mundial del Medioambiente, Orange quiere poner de relieve su compromiso estratégico con el futuro del planeta a través de las iniciativas y proyectos que se llevan a cabo para la reducción de emisiones de CO2 y que le permitirán alcanzar su objetivo de neutralidad en emisiones de carbono en España en 2023. 

Entre las acciones que Orange está llevando a cabo están las encaminadas a fomentar el uso de energía verde. La compañía, que desde 2014 acredita que toda la energía directa que consume procede 100% de fuentes renovables y limpias, está ahora llevando a cabo un proyecto para implantar paneles solares en sus edificios de oficinas y técnicos en España y dar así un paso más hacia el autoconsumo de energía limpia.

Tras la primera instalación llevada a cabo en Coslada hace 3 años, el plan de Orange contempla la implantación de paneles solares en hasta 33 instalaciones en 19 provincias, hasta finales de 2024, 17 de las cuales se completarán a lo largo de este año 2023. La compañía ya dispone de estos paneles solares en edificios de Madrid, Barcelona y Granada y continuará en el resto de territorios en próximos meses.

Con este proyecto, Orange contribuirá a mejorar en un más de un 11% el ahorro energético en estos 33 edificios y un 5% del total del consumo de los centros técnicos, oficinas y tiendas de Orange, reduciendo así el impacto medioambiental asociado.

La potencia (pico) instalada en la totalidad de las instalaciones, alcanzará los 3.115 kW, que llegarán a producir unos 4,9 GWh de energía eléctrica. La inversión final será de aproximadamente, unos 2,5 millones de euros, cuyo retorno se estima en unos 3-4 años, con ahorros de alrededor de 0,76 millones al año.

De forma complementaria a esta iniciativa, la compañía sigue trabajando en otras acciones que también favorecen la mejora de la eficiencia energética y del medioambiente, como son la sustitución por obsolescencia de equipos de entorno técnico, o la implantación de sistemas de control de climatización mediante Inteligencia Artificial, que ayudan a mejorar notablemente los consumos energéticos de los edificios.

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