El año 2026 llegará con un volumen significativo de cambios para autónomos y pymes, muchos de ellos con impacto directo en la gestión económica y administrativa.
No se trata de una única reforma, sino de un conjunto de ajustes normativos que afectan a la cotización, a las prestaciones, a la fiscalidad y a la forma en que se registran y declaran las operaciones económicas.
Cuota de autónomos en 2026 y sistema por ingresos reales
En 2026 se espera una nueva revisión del sistema de cotización por ingresos reales. El modelo actual, basado en tramos de rendimientos netos, continuará siendo la referencia para calcular la cuota y la base de cotización, aunque las cifras definitivas siguen pendientes de acuerdo entre el Gobierno y las organizaciones representativas.
La propuesta más reciente plantea mantener sin cambios la cuota de los tramos con menores ingresos y aplicar incrementos progresivos al resto. Estas subidas se moverían entre el 1 % y el 2,5 %, lo que se traduce en diferencias mensuales aproximadas de entre 3 y 15 euros según el nivel de rendimientos.
| Tramos | Cuota 2025 (€) | Incremento | Diferencia en euros 2025-2026 |
| Hasta 670 € | 200 | 0 | 0 |
| Entre 670 y 900 € | 220 | 0 | 0 |
| Entre 900 y 1.166,70 € | 260 | 1% | 2,9 |
| Entre 1.166,70 y 1.300 € | 291 | 1% | 2,6 |
| Entre 1.300 y 1.500 € | 294 | 1% | 2,6 |
| Entre 1.500 y 1.700 € | 350 | 1% | 2,6 |
| Entre 1.700 y 1.850 € | 350 | 1,5% | 5,3 |
| Entre 1.850 y 2.030 € | 370 | 1,5% | 5,6 |
| Entre 2.030 y 2.330 € | 390 | 1,5% | 5,9 |
| Entre 2.330 y 2.760 € | 415 | 2% | 8,3 |
| Entre 2.760 y 3.190 € | 440 | 2% | 8,8 |
| Entre 3.190 y 3.620 € | 465 | 2% | 9,3 |
| Entre 3.620 y 4.050 € | 490 | 2,5% | 12,3 |
| Entre 4.050 y 6.000 € | 530 | 2,5% | 13,3 |
| 6.001 € o más | 590 | 2,5% | 14,8 |
Por ejemplo, en la anterior tabla se muestra cómo se articula la propuesta de cuotas para 2026 en función de los rendimientos netos mensuales.
En los tramos más bajos, hasta 900 euros mensuales, la cuota permanece totalmente congelada. Los autónomos con ingresos de hasta 670 euros seguirían pagando 200 euros al mes, y quienes se sitúan entre 670 y 900 euros mantendrían una cuota de 220 euros, sin ningún aumento ni impacto económico adicional. Esta congelación se extiende también al tramo entre 900 y 1.166,70 euros, aunque aquí ya aparece un incremento del 1 %, que se traduce en una subida muy moderada de 2,9 euros mensuales.
A partir de los ingresos medios, entre 1.166,70 y 1.700 euros, el aumento se mantiene en el 1 %, con cuotas que oscilan entre 291 y 350 euros y diferencias que rondan los 2,6 euros al mes. Este diseño busca que el ajuste sea progresivo y apenas perceptible en términos absolutos para estos perfiles.
En los tramos intermedios, desde 1.700 hasta 2.330 euros, el incremento pasa al 1,5 %. Aquí la diferencia mensual ya supera los cinco euros, situándose entre 5,3 y 5,9 euros, con cuotas que alcanzan los 390 euros.
Para los ingresos más altos, a partir de 2.330 euros, el esfuerzo contributivo se intensifica. Entre 2.330 y 3.620 euros el incremento es del 2 %, lo que supone subidas de entre 8,3 y 9,3 euros mensuales. Finalmente, desde 3.620 euros en adelante, el aumento llega al 2,5 %, con diferencias que alcanzan los 14,8 euros al mes en el tramo de 6.001 euros o más.
De este modo, quienes menos ingresan conservarían la misma cuota que en 2025, mientras que los autónomos con ingresos medios y altos asumirían un ajuste moderado, inferior al planteado inicialmente por el Ejecutivo.
La falta de cierre definitivo mantiene un escenario de incertidumbre que obliga a trabajar con previsiones prudentes.
Perfil del autónomo y situación real según el Estudio Nacional del Autónomo
El VI Estudio Nacional del Autónomo aporta una visión muy clara del colectivo de cara a 2026.
El perfil mayoritario sigue siendo masculino, con edades comprendidas entre los 40 y los 54 años, y con actividad concentrada en sectores profesionales, científicos y técnicos. El nivel de ingresos más frecuente se sitúa entre los 1.300 y los 1.500 euros mensuales, y el 53 % cotiza por bases inferiores a 1.500 euros.
La estructura empresarial es mayoritariamente unipersonal. El 78 % no cuenta con asalariados y un 18 % combina su actividad como autónomo con trabajo por cuenta ajena.
En cuanto al día a día, el estudio refleja jornadas prolongadas, con un 33 % que supera las diez horas diarias y más de la mitad por encima de las ocho.
El descanso sigue siendo limitado y la conciliación recibe una valoración media de dificultad de 3,7 sobre 5. A pesar de todo, el 61 % se declara satisfecho con su actividad, valorando especialmente la autonomía y el control sobre su trabajo.
Digitalización, inteligencia artificial y productividad
La digitalización continúa avanzando, aunque de forma desigual. El 90 % considera imprescindible Internet para su negocio, el 61 % dispone de página web y solo un 40 % vende online.
La mitad utiliza algún software de facturación, pero únicamente el 28 % emplea herramientas de gestión de clientes, lo que refleja un amplio margen de mejora.
La inteligencia artificial se posiciona como la tendencia más prometedora, elegida por el 47 % de los autónomos.

Más de la mitad la percibe como una oportunidad para automatizar procesos y mejorar la productividad, aunque su uso todavía es moderado y enfocado a tareas concretas.
La principal barrera identificada es la falta de formación práctica y accesible, lo que convierte el aprendizaje aplicado en una de las grandes oportunidades para 2026.
Ayudas y prestaciones para sostener la actividad
Las ayudas seguirán desempeñando un papel relevante. La tarifa plana reducida de 80 euros continúa siendo una herramienta clave para nuevos autónomos, al aliviar la carga inicial de cotización y facilitar el arranque del negocio. Aunque podrían introducirse ajustes, su continuidad en 2026 se da prácticamente por hecha.
La prestación por cese de actividad mantiene su estructura actual, con una cuantía equivalente al 70 % de la base reguladora en los primeros meses. Sin embargo, el elevado porcentaje de solicitudes denegadas ha generado un debate creciente sobre la necesidad de reformar este mecanismo para que funcione como una verdadera red de protección y no solo como una figura teórica.
En materia de permisos, se espera que en 2026 pueda entrar en vigor el permiso por fallecimiento de familiares cercanos y un posible permiso adicional para cuidados paliativos.
Estas medidas buscan ofrecer mayor flexibilidad en situaciones personales complejas, siempre que el proceso de aprobación no sufra retrasos.
Registro horario digital y control de jornada
El registro horario afronta una transformación relevante. El nuevo marco exigirá sistemas digitales que reflejen con precisión los horarios de inicio y fin, las pausas y las horas extra, así como su compensación. Además, la información deberá estar accesible de forma remota para la Inspección de Trabajo.

Se prevé un endurecimiento del régimen sancionador, pasando de sanciones por empresa a sanciones por trabajador afectado.
Para los autónomos con empleados, este cambio obliga a reforzar la gestión interna, pero también puede convertirse en una herramienta útil para ordenar tiempos y cargas de trabajo.
Mecanismo de equidad intergeneracional en 2026
El Mecanismo de Equidad Intergeneracional seguirá incrementándose. En 2026 el tipo total previsto alcanzará el 0,9 % de la base de cotización.
Aunque en el régimen general se reparte entre empresa y trabajador, en el caso del autónomo este incremento se integra directamente en su cuota, elevando ligeramente el coste global de cotizar y haciendo necesario incorporarlo a la planificación financiera anual.

Subida del salario mínimo interprofesional
El salario mínimo volverá a estar en el centro del debate. Entre los escenarios que se manejan se encuentra un acercamiento al 60 % del salario medio, lo que situaría el SMI alrededor de los 19.200 euros brutos anuales.
También se contemplan incrementos más moderados, cercanos al 3 % sobre las cifras actuales.
Para los autónomos con empleados, el impacto es directo y afecta tanto a salarios como a cotizaciones. Para el resto, puede reflejarse de forma indirecta a través de proveedores y servicios externos, obligando a revisar márgenes y precios.
Cuota cero y apoyo autonómico
Algunas comunidades autónomas mantendrán o reactivarán programas de cuota cero para nuevos autónomos. Aunque las condiciones varían según el territorio, estas iniciativas pueden suponer un impulso importante en los primeros meses de actividad. Verificar los requisitos y plazos será (de nuevo) clave para aprovechar esta ventaja.
Factura electrónica y retraso de Verifactu
La implantación de sistemas de facturación homologados continúa avanzando, pero con un calendario más flexible. La obligación de usar Verifactu se ha retrasado hasta 2027 tanto para sociedades como para autónomos y pymes.
Este aplazamiento ofrece margen para adaptarse con tiempo, elegir herramientas adecuadas y ajustar procesos sin prisas.
Nuevo control de pagos digitales y Bizum
Desde enero de 2026, Hacienda ampliará de forma notable el control sobre los pagos digitales. Las entidades financieras deberán remitir información mensual detallada de todas las operaciones realizadas mediante Bizum, tarjetas y otros medios electrónicos, sin importar el importe.
Este nuevo nivel de control elimina los umbrales anteriores y permitirá un mayor cruce de datos con las declaraciones fiscales.
Para el autónomo, separar con claridad los movimientos personales de los profesionales y mantener una contabilidad ordenada será más importante que nunca para evitar sanciones y discrepancias.