La quinta generación de telefonía ya ha dejado de ser una tecnología futurista. Orange desplegará 5G en 93 ciudades españolas durante 2020, un proceso que ya ha empezado con algunas afortunadas.
Orange da cobertura en España a más de 20 millones de clientes, 16 de los cuales son móviles. Este despliegue de 5G marca el inicio de un acceso más rápido y fiable a internet con más velocidad y menos latencia. Se trata del primer despliegue de 5G NSA en 3,5 GHz (release 15).
Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla y Málaga: las pioneras
El pasado 7 de septiembre Orange anunció la activación de la red 5G en cinco ciudades españolas: Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla y Málaga. Este movimiento mantenía el precio de las tarifas 4G existentes para aquellos clientes que saltasen a la quinta generación. Pero, ¿cómo se ha logrado a nivel técnico la llamada ‘release 15’?
Orange ha utilizado dos tecnologías diferentes para suministrar 5G NSA a sus clientes en 2020. Por un lado, la propia NSA (no stand alone) ha sido aplicada en aquellos nodos con antenas de 3,5 GHz obtenidas en la subasta de espectro radioeléctrico de 2018. Este tipo de 5G aprovecha parte de la infraestructura 4G existente.
La segunda tecnología usada es 5G NSA DSS (dynamic spectrum sharing), que permite que el 4G LTE y el 5G coexistan sobre la misma banda, de forma que la concesión de licencia se convierte en una ampliación de uso y no en una nueva solicitud. Esto agiliza notablemente el despliegue de nueva infraestructura.
Tras la ‘release 15’, que se puede considerar una avanzadilla de tecnología 5G soportada por infraestructura 4G, vendrá la ‘release 16’ en los próximos años. Se prevé que durante el primer trimestre de 2021 se realice la subasta de 700 MHz del espectro radioeléctrico, con la que se iniciará la tecnología 5G SA (stand alone). Entonces se mejorará la cobertura en interiores.
¿Cómo será la demanda de 5G en España?
Hacia el año 2000 en España solo existía la tecnología 2G. El 3G, llamado también UMTS o ‘Sistema Universal de Telecomunicaciones Móviles’, aún se encontraba en los laboratorios. Pero saltaría unos años después, primero tímidamente y después con más fuerza, a torres de telecomunicaciones de todo el país.
Como puede observarse en el diagrama de demanda agregada de la CNMV de usuarios de telefonía con base en generación contratada, hacia el año 2005 había muy pocas líneas de usuarios con 3G, que se había ‘encendido’ oficialmente un año antes. Este estaba implantado en muy pocas ubicaciones, como capitales de provincia y ciudades de mucha densidad poblacional.
Luego ocurrió algo totalmente esperado: apenas habían pasado dos años cuando el 3G empezó a comerse el mercado 2G. Y menos de diez años después, el 4G (LTE) siguió el mismo camino que había seguido la tercera generación. Con una diferencia fundamental: el tiempo de adopción fue muy inferior. La adopción tecnológica y su demanda aceleran.
Como se puede ver en el diagrama, la pendiente de la curva del 3G en caída (2013-2020) es mucho más brusca que la que tuvo el 2G (2006, 2017). La tecnología se adopta cada vez más rápido, y es de esperar que el 5G tenga una curva aún más vertical, aunque la CNMV no la reflejó en sus previsiones al no tener datos suficientes.
93 ciudades podrán disfrutar de 5G con Orange
Actualmente ya hay al menos 45 ciudades con 5G NSA, como Zaragoza, Pamplona, Logroño, y a finales de 2020 Orange lo habrá desplegado en 93 ciudades de la geografía española. Allí, los clientes de Orange podrán navegar a decenas de veces la velocidad que tenían con el 4G.
Esto supone un cambio de paradigma importante, y muchas de aquellas predicciones sobre aplicaciones del 5G en la vida cotidiana están a punto de ser desarrolladas. Sobre el mapa de cobertura de Orange se puede observar cómo crece el área bañada por la nueva tecnología: primero en núcleos urbanos de alta densidad, y a medida que pasen los meses, en lugares cada vez más aislados.
Imágenes | CNMV, Ian/Unsplash, RichardMc/Pixabay, Mike Swigunski/Unsplash