Según un informe de Statista, el transporte por carretera es la principal fuente de emisiones de dióxido de carbono en nuestro continente. Y es justo por eso que el cambio climático, los viajes alternativos y el ahorro energético ya ocupan el centro de la atención de muchas personas. Por ello, tras su debut en Estados Unidos, Canadá y Alemania, Google ha estrenado las rutas sostenibles de Google Maps en varios países europeos. Entre ellos, España.
En 2021, la compañía se comprometió a ayudar a mil millones de personas a tomar decisiones más sostenibles para el próximo año. Y, como no podía ser de otra manera, lo está intentando a base de herramientas y tecnologías innovadoras. En particular, con la ‘trinidad’ de nuestros tiempos: big data, machine learning e inteligencia artificial.
Según Google, hay tres formas de reducir las emisiones de carbono a la hora de viajar. La primera es evitar desplazarse y usar herramientas como Google Meet. La segunda es adoptar modos más sostenibles, como favorecer la proximidad. Y, por último, mejorar la eficiencia de cada viaje.
De hecho, la compañía considera que incluso los pequeños cambios marcan una gran diferencia, más si se tienen en cuenta los miles de millones de usuarios que confían en Google Maps todos los días. «Además de mostrar la ruta más rápida, Google Maps también sugiere una opción optimizada para reducir el consumo de combustible y las emisiones«, explicó Adam Elman, director de sostenibilidad en Europa, Oriente Medio y África de Google, en una publicación en LinkedIn.
Tecnología al servicio del planeta
Según el gerente, “para determinar las rutas tomamos en consideración varios factores, como la calidad de la carretera, la directividad del recorrido, las condiciones del tráfico en tiempo real y más datos aún. Además, ahora estamos agregando el ahorro de combustible como un factor adicional, porque sabemos que es algo muy importante para los automovilistas”.
“La tecnología que utilizamos para nuestras rutas ecosostenibles de Google Maps se desarrolla a partir de los datos del Laboratorio Nacional de Energías Renovables (NREL) del Departamento de Energía de Estados Unidos y de la Agencia Europea de Medio Ambiente (AEMA). Al hacer coincidir esta información con las tendencias de conducción de nuestros usuarios, pudimos desarrollar modelos avanzados de aprendizaje automático entrenados según los tipos de motores más populares en una región determinada”.
De hecho, la ruta que implica un menor consumo de combustible varía según el tipo de motor del vehículo. Por ejemplo, los coches diésel suelen ser más eficientes a velocidades más altas que los motores de gasolina y gas. A diferencia de los híbridos y eléctricos, que funcionan mejor en condiciones de tráfico intermitente.
Por ello, Google ha agregado una función para que los usuarios que utilicen las rutas ecológicas puedan elegir el tipo de motor entre las opciones de gasolina, gas, diésel, híbrido y vehículo eléctrico. El resultado propone la mejor ruta con estimaciones sobre la eficiencia energética y el combustible usado.
Las rutas ecosostenibles están teniendo un fuerte impacto en todo el mundo. Desde su lanzamiento en Estados Unidos, Canadá y Alemania, se estima que ya han ayudado a ahorrar más de medio millón de toneladas métricas de emisiones de dióxido de carbono. Lo que equivale a sacar de la circulación a unos 100 000 automóviles. La esperanza, ahora, es alcanzar los mismos resultados también en Europa.
Cómo activar las rutas sostenibles de Google Maps
Para poder aprovechar esta nueva función, hay que seleccionar la ruta sugerida por Google Maps marcada con un icono con forma de hoja verde. A partir de ahí, con unos pocos toques, será posible conocer la estimación de la cantidad de combustible ahorrado y comparar los tiempos con las otras rutas disponibles. Al tocar el icono de los tres puntos en la parte superior derecha, se puede configurar el tipo de motor del vehículo para que la aplicación pueda realizar cálculos más precisos y proponer mejores soluciones.
En los países donde ya se ha puesto en marcha esta función, asegura la compañía, la gran mayoría de los usuarios eligen rutas ecosostenibles. En muchos casos, porque estos recorridos también son la opción más rápida o tienen tiempos de llegada muy similares. Y muchos deciden conducir unos minutos más para ahorrar combustible.
Además de las rutas en automóvil más sostenibles, desde hace tiempo Google Maps sugiere alternativas al coche privado. De hecho, ha aumentado la información sobre rutas ciclistas, incluido un desglose más detallado con datos relevantes tales como el nivel de tráfico y la presencia de escaleras y subidas. Y también se pueden encontrar bicicletas compartidas en más de 500 ciudades de todo el mundo, incluidas Barcelona, Berlín (Alemania), Londres (Reino Unido), París (Francia) y Roma (Italia).
Para viajes más largos, la búsqueda de Google ayuda incluso a encontrar hoteles que se hayan comprometido con las prácticas ecológicas. Lo hace a través de las certificaciones Green Key y EarthCheck, entregadas a los establecimientos que cumplen con altos estándares de sostenibilidad. Así que ya solo toca actualizar Google Maps a la última versión y elegir una ruta sostenible para realizar el próximo viaje.
Por Alberto Barbieri
Imágenes | Suzy Brooks/Unsplash, henry perks/Unsplash, abillion/Unsplash.